Levitaciones
Poesía
Marcos Silber
Diría, rogando no ser malentendida, que más que un libro de poemas éste puede aparecer a primera vista como una colección de estampitas, de esas que alegraban la infancia, o esas figuritas encantadoras que intercambiábamos en el patio de recreo del colegio. Leves, iluminadas, inocentes, voluntariamente kitsch: pero allí está Marcos Silber y esa vuelta de tuerca que es su poesía –irónica, tierna, agazapada en un rincón su sonrisa feroz. De pronto entre las estampitas asoma un aguafuerte implacable, como el retrato de las vecinas enfundadas en sus soledades; o bien del salón en el ángulo oscuro emerge la elegía a la Letrera 22. Aquí está la solista del coro, que “como sablazo le taja la yugular al día cuando ...