QUIENES SOMOS

EBOOKS DE TITULOS ELEGIDOS

CATALOGO

CONCURSO

SERVICIOS

PROMOCIÓN NEOS RELANZAMIENTO

SEGUIMIENTO DE LA EDICION

TALLERES GRATUITOS Inscribirme

GALERÍA

INFORMACIONES ÚTILES

LIBRERÍAS

CONSULTAS Y COTIZACIONES

Oscuro Alfabeto
Antología Poética

Dolores Etchecopar

$ 8500.00 / u$s 5.00  


Comprar en Formato Papel

Editorial Ruinas Circulares
100 páginas
978-987-1610-64-8

Twittear

 

LA IMAGEN COMO DISCURSO DE SENTIDO

La poesía de Dolores Etchecopar es de las más originales en el panorama de la poesía argentina. Sólo parecida a sí misma, funda nuevas realidades en cada poema a partir de imágenes que constituyen el centro esencial de su poética. Y éstas, una vez expresadas, adquieren distintos niveles simbólicos y metafóricos que potencian los enunciados y extienden su desarrollo en el receptor, son elementos vivos que continúan el trayecto poético propuesto en su decir.

Su verso encantatorio rechaza toda interpretación racional sobre la experiencia enunciada porque apela al instinto, a la emoción, a la intuición de un conocimiento adquirido a través de las vivencias del espíritu. Se trata de una poesía que expresa el discurso de una interioridad que pone de manifiesto el alma humana, la cual existe en estado primitivo, infantil, salvaje, y al mismo tiempo, en estado de vigilia.

En cuanto a lo formal, los poemas poseen una dimensión plástica, ya sea por la disposición de los versos en cada poema, como por las imágenes creadas y también por la manera en que las palabras -cuidadosamente elegidas- inauguran nuevas visiones, gracias a la asociación de significados disímiles que, unidos, exponen un aspecto inédito de la realidad.

A veces los poemas presentan un aire de leyenda, otras veces describen imágenes insólitas, arrebatadas al mundo de los sueños, que narran un instante de eternidad en la dimensión de los sentidos.

El sujeto de la enunciación se constituye en diversas máscaras que conforman su unidad. La hija, la madre, la novia y la muchacha, manifiestan diversos rostros del yo poético, mientras que otras figuras como la nodriza, la tañedora, la alumna, son aspectos con roles determinados que funcionan como reflejo de la propia voz.

El gran tema que domina la obra de Dolores Etchecopar es la muerte. Desde su aceptación hasta su incomprensión, atravesando el dolor y el extrañamiento que causa, hasta la transformación y desintegración de todo lo que toca e invade. Aquí la poesía descubre su condición vulnerable y pone de manifiesto el cuerpo y el lenguaje. La poesía se apropia del cuerpo y el cuerpo es consciente del poema. En esta relación que se retroalimenta, el lenguaje, imantado de muerte, no puede nombrar con exactitud la realidad que habita -por torpe, por insuficiente- y la imagen encarna lo que en verdad existe y quiere decir.

Poesía bella, poesía oscura, poesía hechizante y necesaria. Poesía que nos transporta al principio de los tiempos, cuando lo seres conversaban en silencio y comulgaban vida, y las palabras expresaban su candor incesante y reparador, en la inocencia de los días por venir, en el sentido del sinsentido.

                                       ENRIQUE SOLINAS

 

---